¿Cómo estructurar tu libro de no ficción de forma clara y coherente?

La estructura es el esqueleto o la columna vertebral de tu obra

Imagen ilustrativa

Si eres un escritor de libros de no ficción, sabrás lo importante que es estructurar tu libro de forma clara y coherente. La estructura es el esqueleto o la columna vertebral de tu obra, la que le da forma, orden y sentido. Una buena estructura te facilitará la escritura, la lectura y la comprensión de tu escrito.

Pero, ¿cómo estructurar tu libro de no ficción de forma clara y coherente? ¿Qué elementos debes tener en cuenta? ¿Qué tipos de estructuras existen? ¿Cómo elegir la más adecuada para tu tema y tu objetivo? En este artículo, te daré algunos consejos y recomendaciones para que puedas estructurar tu libro de forma profesional.


1. Define el propósito y el público de tu libro

El primer paso para estructurar tu libro de no ficción de forma clara y coherente es definir el propósito y el público de tu libro. ¿Qué quieres conseguir con tu libro? ¿Qué mensaje o idea quieres transmitir? ¿A quién va dirigido tu libro? ¿Qué necesidades o intereses tiene tu público?

Estas preguntas te ayudarán a determinar el tono, el estilo y el nivel de profundidad que debes usar en tu libro. También te ayudarán a seleccionar y organizar la información que vas a incluir en tu libro, así como a establecer la relación que quieres tener con tus lectores.


2. Haz un esquema preliminar de tu libro

Una vez que tengas definido el propósito y el público de tu libro, debes hacer un esquema preliminar de tu libro. Se trata de un documento donde debes plasmar las partes principales que va a tener tu libro, así como los contenidos que vas a desarrollar en cada una de ellas.

Un esquema preliminar te servirá como guía y referencia durante todo el proceso de escritura. Te permitirá tener una visión global y general de tu libro, así como identificar los puntos fuertes, los débiles, las lagunas o las redundancias.

El esquema preliminar puede variar según el tipo y la extensión de tu libro, pero en general debe incluir los siguientes elementos:

  • Un título provisional que resuma el tema y el enfoque de tu libro.
  • Una introducción donde presentes el tema, el objetivo, la hipótesis o tesis principal, la metodología y la estructura de tu libro.
  • Un desarrollo donde expongas los argumentos, las evidencias, los datos y la información que sustenten tu hipótesis o tesis principal. Puedes dividirlo en capítulos o secciones según los subtemas o aspectos que quieras abordar.
  • Una conclusión donde resumas los puntos principales, las aportaciones, las implicaciones y las recomendaciones de tu libro.
  • Un epílogo donde reflexiones sobre el proceso de escritura, las dificultades, los logros y los aprendizajes que has obtenido con tu libro.
  • Un índice donde indiques las páginas donde se encuentran cada una de las partes de tu libro.
  • Una bibliografía donde cites las fuentes que has consultado para hacer tu investigación.
  • Un anexo donde incluyas material complementario o adicional que no hayas podido incorporar en el desarrollo de tu libro.


3. Elige un tipo de estructura para tu libro

El siguiente paso para estructurar tu libro de no ficción de forma clara y coherente es elegir un tipo de estructura para tu obra. Existen diferentes tipos de estructuras que puedes usar según el tema, el objetivo y el público de tu libro. Algunos ejemplos son:

  • La estructura cronológica: Consiste en ordenar los contenidos según un orden temporal o histórico. Es adecuada para libros que narran hechos, acontecimientos o procesos que han ocurrido a lo largo del tiempo. Por ejemplo, una biografía, una crónica o una historia.
  • La estructura temática: Consiste en ordenar los contenidos según un orden temático o conceptual. Es adecuada para libros que analizan, explican o comparan diferentes aspectos o dimensiones de un mismo tema. Por ejemplo, un ensayo, un manual o un estudio.
  • La estructura problemática: Consiste en ordenar los contenidos según un orden problemático o dialéctico. Es adecuada para libros que plantean, discuten o resuelven un problema, una cuestión o una controversia. Por ejemplo, una investigación, una tesis o una argumentación.
  • La estructura narrativa: Consiste en ordenar los contenidos según un orden narrativo o literario. Es adecuada para libros que cuentan, relatan o describen una historia, una experiencia o una vivencia. Por ejemplo, una novela, un testimonio o un reportaje.

Estos son solo algunos ejemplos de tipos de estructuras que puedes usar para tu libro. Puedes elegir el que más te convenga o combinar varios de ellos según tus necesidades y preferencias.


4. Revisa y ajusta tu estructura

El último paso para estructurar tu libro de no ficción de forma clara y coherente es revisar y ajustar tu estructura. Se trata de comprobar que tu estructura cumple con los requisitos de claridad y coherencia que debe tener toda obra de no ficción.

Para revisar y ajustar tu estructura, debes tener en cuenta los siguientes aspectos:

  • La lógica: Tu estructura debe seguir un orden lógico y secuencial que facilite la comprensión y el seguimiento de tu libro. Debe haber una conexión y una transición fluida entre las partes, los capítulos y los párrafos de tu libro.
  • La consistencia: Tu estructura debe mantener una unidad de sentido y de criterio a lo largo de todo el libro. Debe haber una coherencia entre el título, la introducción, el desarrollo, la conclusión y el epílogo de tu libro.
  • La proporción: Tu estructura debe guardar una proporción equilibrada entre las partes, los capítulos y los párrafos de tu libro. Debe haber un balance entre la extensión, la profundidad y la relevancia de cada uno de ellos.
  • La originalidad: Tu estructura debe aportar un valor añadido a tu libro. Debe reflejar tu personalidad, tu estilo y tu visión sobre el tema que tratas.

Con estos cuatro pasos, podrás estructurar tu libro de no ficción de forma clara y coherente. Recuerda que una buena estructura es la base de un buen libro de no ficción. Con ella, podrás organizar, ordenar y presentar tus ideas de forma eficaz y profesional. Además, podrás ofrecer a tus lectores un contenido de calidad, útil e interesante.


¡Anímate a estructurar tu libro de forma profesional!