Los diferentes roles en las familias narcisistas

Papeles en una familia narcisista

La dinámica de una familia narcisista puede ser compleja y tóxica, y es común que cada miembro juegue un papel específico en ella. Conocer estos roles puede ayudar a entender mejor la dinámica familiar y cómo afecta a cada individuo. En este artículo exploraremos los diferentes roles en una familia narcisista y cómo afectan a cada miembro.

El primer rol en una familia narcisista es el del padre o la madre narcisista. Esta persona busca ser el centro de atención y controlar a todos los miembros de la familia. Se preocupa más por su propia imagen y necesidades que por las de sus hijos. Pueden ser críticos y castigadores si sus hijos no cumplen con sus expectativas y pueden utilizar el chantaje emocional para mantener el control.

El segundo rol es el del "niño dorado". Éste es el hijo o hija que cumple con las expectativas y necesidades del padre o la madre narcisista. Es el favorito y suele ser tratado mejor que los otros hijos e hijas. Es común que este miembro adopte los mismos rasgos narcisistas del padre o la madre y se convierta en un narcisista también, a no ser que sepa ver esta circunstancia y ponga remedio.

El tercer rol es el del "chivo expiatorio", que hace referencia al hijo o la hija que es visto como el problema en la familia. El padre o la madre narcisista lo culpa de todos los problemas y lo castiga con frecuencia. Este miembro de la familia suele ser marginado y aislado de los demás miembros de la familia. En general, pueden sentirse rechazados y tener problemas de autoestima. Se dan casos en los que un hijo o hija pasan de ser dorados a chivos expiatorios por el hecho de abrir los ojos, darse cuenta de la situación de su familia y denunciarlo de alguna manera. O bien por la intervención de otras figuras externas que, movidos por celos, envidias, etc., utilizan cualquier situación para que este hijo o hija dorada pase a jugar el difícil rol de chivo expiatorio.

El cuarto rol es el del "niño perdido", que es un término que alude al hijo o hija que trata de mantenerse invisible y no causar problemas en la familia. No recibe mucha atención y es común que se sienta desconectado de los demás miembros de la familia. Pueden tener problemas de ansiedad y depresión. Dentro de este macabro juego, un niño o una niña perdida  puede pasar a jugar cualquier otro papel en la familia, como en cualquiera de los otros casos. Por ejemplo, si el "niño dorado" señala a la familia narcisista y se enfrenta a esa situación, puede pasar a ser el "chivo expiatorio" y el "niño perdido" empezar a ocupar el lugar del dorado. Cualquier macabro movimiento es válido para mantener el status quo de la familia y, sobre todo, la apariencia de normalidad.

El quinto rol es el del "acomodador". Este es el hijo/a que intenta mantener la paz en la familia a cualquier costo. A menudo actúa como intermediario entre los miembros de la familia y trata de satisfacer las necesidades del padre o de la madre narcisista. Pueden sentirse atrapados y no tener una identidad propia.

Es importante destacar que estos roles pueden ser dinámicos y cambiantes, como hemos visto en algunos casos, y un miembro puede desempeñar varios de ellos en diferentes momentos o pasar de uno a otro por las circunstancias de cada momento. Además, estos roles pueden tener efectos duraderos en la personalidad y el comportamiento de cada miembro de la familia.

En conclusión, los diferentes roles en una familia narcisista pueden ser dañinos y tóxicos para los miembros involucrados. Reconocer y comprender estos roles puede ser el primer paso para sanar y salir de una dinámica disfuncional.